¿Cómo convences a alguien que tiene una opinión diferente a la tuya? O mejor aún, ¿Cómo convences a alguien? La gente se decanta hacia un lado u otro jamás dependiendo de si es lo correcto o no, las personas se decantan hacia un lado u otro en base si les conviene o no y de sus emociones.
Un agente de seguros de salud te dirá que una mutua privada es la mejor opción. Un enfermo crónico te dirá que hay que preservar la salud pública. ¿Pero a quién hacemos caso? A la persona que se interesa por nuestro dinero y que se gana la vida con las enfermedades de la gente, o a una persona que vive el día a día una enfermedad y su interés es transmitir la ayuda.
¿Es más fácil defender el sadismo o lo justo y correcto a la hora de aplicar métodos para convencer?
Las empresas médicas de Estados Unidos y farmacéuticas gastan millones de dólares al año en manipular a la gente haciéndole creer que pagar por la medicina, aunque sean precios prohibitivos es la mejor opción. ¡Y la gente se convence de ello! Es decir, a gente que se está muriendo por no poder pagar sus medicinas, gente que lo pierde todo y hasta le embargan la hipoteca de la casa por no poder pagar un tratamiento, la están convenciendo de que lo que le está pasando es más justo y mejor que que la traten como a una persona humana y la mediquen.
La cosa funciona así. Los seres humanos crearon hace muchos años el dinero para motivar a las personas a trabajar y poder conseguir aquello que desean. Pero llega un punto en el que el dinero cobra hasta más importancia que las propias vidas humanas. Cobra tanta importancia que los que contratan a los científicos que investigan medicamentos lo hacen para ganar dinero exclusivamente. De tal modo que crean unos medicamentos, la gente hace cola por ellos y dicen: “Solo los que tengan más de 70.000 euros podrán llevarse el medicamento y salvar su vida”.
Entonces las 100 personas que están en cola entran en desespero, pero no pueden revelarse porque la sociedad está formada de leyes, para reprimir a cualquier ciudadano en su intento de hacerse valer. Así que de las 100 personas en la cola tan solo una puede pagar el medicamento. Las demás tienen que vender su casa, sus pertenencias y todo para poder pagarse el medicamento y vivir.
- ¿Por qué haces esto? – le preguntan al dueño de la farmacéutica
- Por qué harán lo que sea para pagar, es el instinto de supervivencia, darán todo lo que tengan para pagar – Responde el director
- Pero se perderán vidas humanas – le responde el lacayo
- Bueno – responde el Sr. Burns – pero ganaremos muchísimo más si lo hacemos así.
Entonces de la cola se salvan 60 personas, sin embargo lo han perdido todo, las otras que quedan se resignan y mueren.
Pero eso no les basta a dichos dueños y especuladores de la salud. ¡Podemos ganar más! se plantean. Así que dejan de investigar curas, las curas actualmente ya son solo un recuerdo. ¿Por qué cobrar a alguien 100.000$ por salvarle la vida? ¿Si puedo estar cobrándole 50.000$ al año durante 10 años?
Ya no investigan curas, investigan “cronificar” enfermedades para seguir lucrándose. Igualmente aunque inventan pastillas que aplacan los síntomas, esas pastillas no son la cura y por lo tanto la personas más tarde o temprano terminará muriendo, eso si, hipotecará o hará lo que haga falta para pagar y muchos de ellos vivirán menos porque ya no podrán pagar más las pastillas.
Sin embargo, las farmacéuticas bien saben eso, así que los medicamentos que cronifican los bajan de precio, haciéndolos menos prohibitivos porque estarán recibiendo mucho dinero de dichos medicamentos durante años.
¿Qué métodos de convencer se usan para que todo un país con más de 250 millones de habitantes esté de acuerdo con este sistema? Fácil. Publicidad y anuncios, en televisión, radio… Sobornos a políticos y sobretodo transmitir un lenguaje claro, fácil y directo:
- La salud pública es igual a comunismo ruso, ese comunismo malo y re-malo que sale 20.000 veces en las películas de Hollywood (el miedo)
- La salud pública es muy mala y sufriréis más (miedo)
Estas compañías que no parpadean en matar millones de vidas al año se gastan una cantidad bestial de dinero en publicitar esas ideas, dinero que, por otra parte, podrían destinar en salvar vidas, pero prefieren gastarlo en conservar su capricho de lucrarse a toda costa.
¿Te he convencido? ¿Crees que es un buen método para convencer lo que acabo de hacer?
Simplemente he argumentado, desde el cáliz más humano y directo lo que significa la sanidad privada y el negocio de la industria farmacéutica. Cuando lees cada palabra en tu mente imaginas las situaciones y no serías humano si no las vieras detestables e inhumanas.
He hecho que experimentes con tus emociones de tal modo que te sientas identificado. Solo aquellas personas que tienen intereses propios en sanidad privada serían capaces de seguir dando argumentos y defender la idea de que está bien lucrarse con el sufrimiento de la gente y por supuesto ellos no lo verían así, darían datos y excusas para no verlo así.
¿Qué métodos para convencer usarías con alguien?
Simplemente tienes que hacerle ver el lado más humano de lo que apoyas, sobretodo tienes que hacer que empatice y se vea reflejado en sus emociones, haz que experimente con sus emociones porque si no logras mover esa parte no lograrás convencerla de ningún modo.
La empatización es una poderosa habilidad y para desarrollar métodos para convencer simplemente tienes que seguir unas estrategias y técnicas. Hay muchas formas de rebatir argumentos, descalificarlos, darle la vuelta a algo… Saber cuando has perdido, cuando estás en una situación negativa para ti…
No es tan fácil como: “siéntate y argumenta”, que va, hay que utilizar métodos para convencer, todos los detalles trucos y técnicas que tengas al alcance de la mano.
Solo así lograrás ese ascenso que tanto deseas o conseguir convencer a tu equipo de trabajo que lo que haces es la mejor opción. O quizás convencer a tus amigos para ir a tomar un café en tu bar favorito en vez de a uno que no te gusta nada. Los límites de dónde aplicas los métodos para convencer solo los pones tú.
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